




Cultura hip-hop
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El hip-hop es mucho mas que un estilo de música y de baile, es una cultura. Una forma de vida. No es solamente vestir de ancho, llevar gorra y cadenas, fumar porros y pintar grafitis. Hay demasiados prejuicios asociados a esta cultura, la delincuencia, las drogas, la violencia... Poca gente aprecia el hip-hop como algo artÃstico, se limitan a ver los grafittis como meras manchas en la pared y creen que cualquiera podrÃa escribir rap, sin darse cuenta que un rapero es un poeta, y que las palabrotas son un recurso expresivo de crÃtica, no son mera violencia verbal.
Este movimiento surgió a finales de los 70 en los barrios más marginales de Nueva York, acunado por las comunidades afroamericanas y latinoamericanas. Nació en un contexto histórico de pobreza, violencia, racismo, etc. Para este grupo de jóvenes pioneros, ofrecÃa una salida reaccionaria a las desigualdades y penurias que se vivÃan en las áreas urbanas más pobres de Nueva York. Funcionó, como una forma de auto-expresión que proponÃa reflexionar, proclamar una alternativa, tratar de desafiar o simplemente explicar las circunstancias de dichos entornos, favoreciendo su desarrollo artÃstico.
La violencia y la delincuencia ya estaban presente en los ghettos mucho antes que el hip hop, y los primeros Mc's (maestros de ceremonias), B-boy's (breakers) o Writters (grafiteros) buscaban una alternativa diferente para poder llegar a la gente, y reivindicar sus derechos, mentalizar en contra del racismo en una sociedad en la que los ricos controlaban los medios de comunicación.
El hip-hop no agrede ni influencia negativamente, reivindica e invita a la reflexión, rompre con estereotipos, abre mentes y cierra bocas. El problema no está en los raperos, sino en la sociedad, porque si ellos no tuvieran motivos para rapear, no resultarÃan tan violentos. Todas las letras suelen estar cargadas de crÃtica social, hay raperos más revolucionarios que otros, el grupo "Los chicos del maiz" son un claro ejemplo, un caso extremo es el del rapero comunista Pablo Hasel, que en 2014 fue condenado a dos años de prisión por enaltecimiento al terrorismo en sus letras.
Por otro lado, es desmotivante que en una sociedad "moderna", piensen que alguien se droga porque le guste el hiphop. Hay quienes apoyan el hiphop y se drogan, y quienes no, hay quienes venden droga porque necesitan dinero, pero eso ocurre en la cultura del Hip-Hop y en todas, y también hay quien trafica para tener que decir y dar una imagen, como dice el rapero Shotta en uno de sus temas: "¿Dices que vendes droga?, eso no se dice idiota", pero al final cada cual decide que imagen quiere dar y entiende el hiphop de una forma distina. Aun asà deberÃa quedar claro que no existe ninguna relación directa entre drogas y rap. Habrá gente que se escandalizará al ver videoclips en los que salen manejando armas, como si se tratara de una pelÃcula de mafiosos, los gangster del hiphop han adecuado su nombre a "gangsta's", pero hay diferencias muy latentes entre el rap gangsta de EEUU y el español. En cuanto a las armas, en los inicios del hiphop estadounidense estaban presentes, pero también hay que tener en cuenta que en Estados Unidos casi todo el mundo cuenta con un arma. En el contexto español, también hay armas, canciones que hablan de ellas, videoclips en los que aparecen... pero no hay tantas, ni toman tanto protagonismo. Tal y como Camilo Gil Rojas, un rapero y productor afirma: "No es que el hip hop incite a cometer delitos pero si es verdad que muchos raperos han sido delincuentes e incluso siguen siéndolo".
En pocas palabras, no es más delincuente el que rapea o baila hiphop, sino que cualquier tribu urbana tiene gente que mancha su imagen, pero por ello no debe generalizarse. Esta cultura es poesÃa y no hay que dejar de conocerla por prejuicios que rodean nuestro dÃa a dÃa.
Es desmotivante que en una sociedad moderna piensen que alguien se drogue porque le guste el hiphop




